Decimos que no habrá  clases ni en la UNCUYO ni en otra universidad nacional, pues la medida ha sido convocada por las dos federaciones docentes universitarias mayoritarias: CONADU Histórica y CONADU. 

Pero sabemos que para que la universidad pública logre su merecida dignidad laboral y académica es imprescindible que el movimiento reivindicativo nos unifique a toda la comunidad universitaria. Es decir, necesitamos de la comprensión y la mayor solidaridad activa del movimiento estudiantil. Docentes y estudiantes universitarios, secundarios y primarios constituyen una fuerza imparable. 

Comunidad educativa de la UNCuyo: estamos evitando que nos expropien el futuro de la Universidad como la conocemos. 

Mendocinos: defendemos las posibilidades que nuevas generaciones accedan a estudios universitarios con igualdad de oportunidades y estamos asegurando el desarrollo local, a través de mejores condiciones para trabajar, estudiar y ejercer.