En la primera paritaria local de 2019 recibimos un proyecto de Incentivo por Prestación Asistencial elaborado en 2016 por el Director del Hospital. Si bien la propuesta era conocida y fue previamente rechazada en 2015, cuando la presentó el vicerrector, la misma se analizó nuevamente con las delegadas del hospital ya que se viene aplicando irregularmente, en especial para los nuevos agentes que se incorporaban al hospital.
La situación en nuestro hospital es crítica desde sus comienzos. Nunca se logró el funcionamiento acorde a otros hospitales universitarios, donde se remunera la tarea asistencial con cargos no docentes del agrupamiento técnico profesional (según CCT 366/2006) mientras que la tarea docente se hace a través de cargos docentes universitarios. Desde su creación el hospital atiende con cargos docentes, lo que limita las tareas asistenciales tanto como las de docencia. La mirada mercantilista de la salud de las últimas gestiones empeoró la situación. Hoy promueven convenios individuales, centrados en la “productividad”, con una flexibilización laboral insalubre para trabajadores y pacientes.
La asamblea realizada el 13 de junio pasado tuvo una importante participación, que permitió profundizar el análisis y elaborar propuestas consensuadas y votadas por unanimidad que se elevarán a la próxima reunión de paritaria local.
La experiencia democrática manifestada a través de elecciones de delegadas, asambleas y una fluida comunicación interna, permitieron detectar colectivamente las maniobras de la dirección y conquistar derechos como la efectivización e importantes reparaciones salariales. Aun así, queda mucho por conquistar para lograr que nuestro hospital promueva la salud interna y de la comunidad.